Obesidad y comida chatarra podrían causar reflujo en adolescentes
30/08/2006
Según lo expresa Sylvia Alegría, académica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, entre el 80 y 90 por ciento de los menores de un año tiene reflujo fisiológico, es decir, vomitan o regurgitan parte de lo que ingieren. Este problema espontáneo se produce por alteraciones anatómicas y de motilidad intestinal transitorias que son propias de la edad y, en consecuencia, cuando los niños cumplen entre 12 y 18 meses dan por superados estos inconvenientes. Sin embargo, parte reducida de estos lactantes puede padecer de reflujo patológico, el cual requiere de un tratamiento más complejo, que va desde el uso de antiácidos hasta las cirugías.
"En estos niños es muy común los vómitos frecuentes después de cada comida, hipo, (signo indirecto de esofagitis por irritación de la mucosa esofágica), y el rechazo a la alimentación por el dolor que les provoca ingerir productos. Asimismo, pueden tener un mal dormir o ponerse irritables al acostarse, ya que al devolvérseles la leche tienen dolor e incomodidad. También pueden presentar complicaciones respiratorias, laringitis, otitis, bronquitis obstructivas y neumonías a repetición", señala la doctora Sylvia Alegría.
La gastroenteróloga advierte que quienes tienen la costumbre de comer y acostarse de inmediato o de comer en la cama pueden padecer con frecuencia de reflujo. "Por eso se recomienda no acostarse al menos una hora después de comida y si se trata de niños pequeños que eviten tomar leche antes de irse a la cama o para quedarse dormidos, ya que ello predispone a la regurgitación", comenta.
En tanto, señala que en los últimos años los gastroenterólogos han detectado un aumento de reflujo en adolescentes, hecho que estaría vinculado al aumento del consumo de alimentos ricos en grasas. "Por una parte comen en forma abundante y por otra ingieren productos que tienen un vaciamiento gástrico más lento. Así que es necesario ordenarlos en la comida y cambiar sus hábitos, fomentando el consumo de alimentos naturales y más ricos en fibra".
Algunos de estos jóvenes acuden al médico consultando por laringitis, sinusitis, complicaciones respiratorias y otitis reiteradas, tal como ocurre con los menores, pero en realidad ello está enmascarando problemas de reflujo, explica la especialista de los hospitales Roberto del Río y Clínico de la Universidad de Chile.
La doctora Alegría participará en el curso Visiones de la Pediatría Moderna, organizado por el Hospital Clínico de la Universidad de Chile, el cual se llevará a cabo entre el 1 y 2 de septiembre en el Hotel Torremayor, ubicado en Avenida Ricardo Lyon Nº 322, Providencia.
Durante la actividad también se abordarán los temas: constipación, dentición y conducta alimentaria; gripe aviar, inmunizaciones, diarrea aguda, salud mental y obesidad y síndrome metabólico.
Fuente: Universidad de Chile / PG / FOM.
"En estos niños es muy común los vómitos frecuentes después de cada comida, hipo, (signo indirecto de esofagitis por irritación de la mucosa esofágica), y el rechazo a la alimentación por el dolor que les provoca ingerir productos. Asimismo, pueden tener un mal dormir o ponerse irritables al acostarse, ya que al devolvérseles la leche tienen dolor e incomodidad. También pueden presentar complicaciones respiratorias, laringitis, otitis, bronquitis obstructivas y neumonías a repetición", señala la doctora Sylvia Alegría.
La gastroenteróloga advierte que quienes tienen la costumbre de comer y acostarse de inmediato o de comer en la cama pueden padecer con frecuencia de reflujo. "Por eso se recomienda no acostarse al menos una hora después de comida y si se trata de niños pequeños que eviten tomar leche antes de irse a la cama o para quedarse dormidos, ya que ello predispone a la regurgitación", comenta.
En tanto, señala que en los últimos años los gastroenterólogos han detectado un aumento de reflujo en adolescentes, hecho que estaría vinculado al aumento del consumo de alimentos ricos en grasas. "Por una parte comen en forma abundante y por otra ingieren productos que tienen un vaciamiento gástrico más lento. Así que es necesario ordenarlos en la comida y cambiar sus hábitos, fomentando el consumo de alimentos naturales y más ricos en fibra".
Algunos de estos jóvenes acuden al médico consultando por laringitis, sinusitis, complicaciones respiratorias y otitis reiteradas, tal como ocurre con los menores, pero en realidad ello está enmascarando problemas de reflujo, explica la especialista de los hospitales Roberto del Río y Clínico de la Universidad de Chile.
La doctora Alegría participará en el curso Visiones de la Pediatría Moderna, organizado por el Hospital Clínico de la Universidad de Chile, el cual se llevará a cabo entre el 1 y 2 de septiembre en el Hotel Torremayor, ubicado en Avenida Ricardo Lyon Nº 322, Providencia.
Durante la actividad también se abordarán los temas: constipación, dentición y conducta alimentaria; gripe aviar, inmunizaciones, diarrea aguda, salud mental y obesidad y síndrome metabólico.
Fuente: Universidad de Chile / PG / FOM.
Lic. Nut.Miguel Leopoldo Alvarado Saldaña
Conóceme en http://www.redvida.com/profile-miguelleopoldo